Hoy ha presidido la Santa Misa Fray Colin Charles SAMMUT, Vicario de la Provincia de San Pablo Apóstol en Malta.
Fray Jude en su predicación ha hablado de la gloria de Dios en el Evangelio de Juan; esta se corresponde con la ofrenda que Jesús hace de sí mismo en la Cruz. ¿Cuáles son realmente las glorias de nuestra Orden? Debemos mirar con los ojos del Evangelio todo lo que hacemos y proclamamos.
Los trabajos en el aula iniciaron con la moción n. 3 presentada por Fray Francesco RAVAIOLI de la Provincia Italiana de San Antonio de Padua (Italia del Norte). El Capítulo general pide a cada jurisdicción profundizar el tema de la relación, la colaboración y la corresponsabilidad apostólica de los frailes con los laicos, así como la realización de una asamblea provincial/custodial de frailes y laicos para reflexionar juntos sobre algunos proyectos comunes de evangelización. Después de la discusión se tuvo la votación y la aprobación.
La moción n. 4 ha sido presentada por Fray Roberto BRANDINELLI, Vicario de la Provincia Italiana de San Antonio de Padua (Italia del Norte). El Capítulo general pide a cada Federación promover la reflexión sobre temas de crisis socio-ambiental. Tomando como punto de referencia la Encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco, se profundicen las líneas principales de pensamiento y se estudien los modos para consolidar una conciencia ecológica común. Además, cada jurisdicción establezca criterios locales de justicia y de sostenibilidad del medio ambiente, para evaluar y administrar los propios recursos financieros e inmobiliarios.
Sobre el mismo tema, Fray Mauro GAMBETTI Custodio del Sacro Convento de Asís, ha presentado el proyecto “Hermano Sol”; en concreto, se busca respetar el medio ambiente mediante el uso ecológico de la energía, del agua, de los materiales que se consumen, etc. De los resultados obtenidos, se puede afirmar que el cuidado ecológico consiente también un ahorro económico. Terminada la discusión, los Capitulares aprobaron el texto.
Posteriormente, Fray Francesco PANIZZOLO de la Provincia Italiana de San Antonio de Padua (Italia del Norte) ha presentado la moción n.5. El Ministro general con su Definitorio debe poner en marcha una reflexión sobre los nuevos medios de comunicación utilizados por los religiosos, para así establecer algunos lineamientos que permitan orientar en modo claro y unívoco el utilizo de los mismos. Después de las preguntas, las aclaraciones y la discusión en el aula, el texto ha sido aprobado.
Por la tarde, los Capitulares se ocuparon de algunas variaciones textuales solicitadas sobre los Estatutos ya aprobados. El primer texto es nuevo y se refiere a casos excepcionales, donde el Ministro general, con el consentimiento de su Definitorio, puede permitir la existencia de una Custodia que, debido a circunstancias eclesiales, sociopolíticas y culturales específicas, no está en condiciones de convertirse en Provincia.
El segundo texto se refiere al Delegado provincial o custodial para la Justicia, la Paz y la Integridad de la Creación; cuando una jurisdicción no pueda nombrarlo, puede asociarse con otras para nombrar uno inter-provincial o federal.
Además, ha sido aprobado un texto alternativo que se refiere siempre a casos excepcionales, donde, por el bien de la misma Provincia o Custodia, el Ministro general con el consentimiento de su Definitorio puede anticipar o posponer el Capítulo provincial o custodial, por un período superior a seis meses.
La última votación de hoy se ha referido a la figura del “cronista” del Convento; hasta este momento no estaba presente ni en las Constituciones ni en los Estatutos generales; con la aprobación de su existencia se ha colmado esta laguna jurídica.
Fray Aurelio ERCOLI, cronista
En el Evangelio de hoy encontramos a Jesús que ora al Padre para que lo glorifique. A menudo, definimos la gloria como poder o magnificencia. En el Evangelio de Juan, la gloria es la posibilidad de expresar el amor hasta el extremo. La hora de la gloria es la cruz. La gloria que el Padre da al Hijo es la invitación a morir a sí mismo, para darnos vida en su amor.
A veces escuchamos la expresión: la “gloria” de la Orden. ¿Qué significa? ¿Significa los Santos que hemos tenido, cuántas instituciones hemos dirigido, cuántos estudiosos hemos preparado? ¿O más bien significa cuánto cada uno de nosotros está dispuesto a morir a sí mismo? ¿Cuánto cada uno de nosotros está dispuesto a sacrificar su comodidad por aquello que puede ser una expresión de profundo amor? ¿Cuánto estamos dispuestos a sacrificar nuestros sueños y esperanzas, por el bien de la Orden? ¿Cuánto verdaderamente creemos que la minoridad sea una expresión de la gloria de Dios?
¡Padre, glorifica a tus hijos!