La jornada ha iniciado con la Santa Misa a las 7.30 horas, en la capilla de Fray Elías: ha presidido Fray Carlos Alberto TROVARELLI, Asistente general FALC (Federación América Latina Conventuales); como de costumbre, la homilía la tuvo Fray Jude Martin WINKLER, Asistente general CFF (Conventual Franciscan Federation).
Este hermano ha hablado de la promesa hecha por Jesús de quedarse a nuestro lado para siempre, a través del Espíritu Santo. El Evangelio de Juan muestra al Espíritu como el Paráclito: Aquel que consuela y ayuda. En estos días, los Capitulares deben escuchar al Espíritu que habita nuestros corazones, para tomar decisiones con el corazón, mirando más allá de las inevitables dificultades.
Hoy es la fiesta de San Bernardino de Siena y los trabajos capitulares iniciaron a las 9.30 horas con los festejos en honor de la Provincia de los Santos Bernardino y Ángel en Italia (Abruzzo) y del Ministro provincial de la Provincia de Santa Isabel en Alemania, Fray Bernhardin M. SEITHER.
Después se votó y aprobó el horario y el calendario del Capítulo. En seguida se discutió sobre el Directorio y se dio escucha a las propuestas de modificaciones por parte de los grupos (Coetus) FEMO (Foederatio Europae Mediae et Orientalis) y CFF (Centralis Europae Foederatio). En síntesis, se pide una mayor atención a los iuxta modum para que sean discutidos lo más posible en aula; ya que este tema concierne a la votación de los Estatutos generales, el Discipulado Franciscano y la Ratio Studiorum, se ha decidido votar estas modificaciones después de que la Comisión jurídica haya aclarado los términos exactos de las variaciones. Por lo tanto, el Directorio ha sido aprobado, dejando para un segundo momento las modificaciones solicitadas.
Después se ha elegido a Fray Tomasz SZYMCZAK como Secretario general del Capítulo y a tres Moderadores: Fray Jan MACIEJOWSKI, Fray Colin Charles SAMMUT y Fray Maurizio BRIDIO. También se tuvo la elección de los miembros del Consejo de Presidencia, de la Comisión Central, de los Revisores de cuentas y de los Auditores de causas.
Antes de pasar a la lectura de las relaciones, se ha dado lectura en aula a los mensajes de apoyo y saludos por el Capítulo, recibidos de Mons. José Rodríguez CARBALLO (OFM) Secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada), de Mons. Giuseppe PIEMONTESE Obispo de Terni, de Mons. Roberto CARBONI Arzobispo de Oristano, de Mons. Gianfranco Agostino GARDIN Arzobispo de Treviso, y de las Misioneras de la Inmaculada «P. Kolbe».
Por la tarde, después del rezo de la Hora Nona, la Segunda Sesión inició con el Ministro general Fray Marco TASCA, que ha dado lectura a su relación. Después del agradecimiento a Dios y a sus colaboradores, el Ministro saliente ha centrado su reflexión sobre el Evangelio del “joven rico” (Mc 10, 17–27). La enseñanza que nos ha entregado es que para seguir al Señor Jesús no bastan las buenas intenciones; necesitamos abandonarnos en su voluntad y no pretender salvarnos con nuestras solas fuerzas. Para no quedarnos decepcionados y en la amargura, como el joven que no acepta el consejo de Jesús, necesitamos dejarnos amar profundamente y morir a nosotros mismos.
Después siguió la lectura de las realidades más significativas de la Orden, donde ciertamente las sombras no faltan, sobre todo al respecto del innegable envejecimiento de los frailes en las jurisdicciones de más antigua constitución. También se revelan muchas luces que el Señor nos hace ver, en particular la vitalidad de los hermanos en el hemisferio sur del mundo, que viven el entusiasmo de una Iglesia siempre joven.
Cabe destacar la conclusión de la relación, en la que Fray Marco prueba a leer proféticamente las prospectivas de nuestra Orden; cada realidad geográfica debe ser considerada en su especificidad, y de ello emerge que el Señor Jesús es quien todavía puede darnos tantas oportunidades de evangelización, si nosotros no dejamos de dar testimonio de nuestro carisma y no nos acomodamos en las obras que desde siempre nos han distinguido.
Fray Aurelio ERCOLI, cronista
En el primer día de labores de nuestro Capítulo general, escuchamos la promesa que Jesús hace en el Evangelio de hoy: Él mandará el Espíritu Santo, el Paráclito, que nos enseñará y nos recordará lo que Él ha dicho.
La palabra usada para referirse al Espíritu es “Paracletos”. Esta palabra posee muchos significados. Bien podría significar: abogado, intermediario, consolador, asistente, consejero.
Durante este Capítulo necesitamos del Espíritu como mediador entre nosotros y Dios, para que nos ayude a caminar en las sendas del Señor. Necesitamos del Espíritu como mediador también entre nosotros, para vivir la relación con el otro en la caridad divina.
Necesitamos del Consolador para hacer penitencia y luto por nuestras faltas y también por la ausencia de los hermanos que nos han dejado.
Necesitamos del Espíritu para que nos ayude a valorar el sexenio transcurrido y nos guíe hacia el futuro.
Necesitamos del Espíritu en la profundidad de nuestros corazones, porque es allí donde reside el Espíritu. Durante este Capítulo debemos escuchar la voz del Espíritu en nuestros corazones. A menudo, en los Capítulos escuchamos nuestras exigencias “de ombligo”, pensando solamente a todo aquello que es bueno para nosotros y para nuestras jurisdicciones. El Espíritu en nuestros corazones, aquella “paloma” que nos enseña a amar a Dios y a amarnos unos a otros, quiere enseñarnos y hacernos recordar lo que realmente importa.
¡Espíritu Santo, ven!